Piccolo Mondo
Hauptstrasse 5, 8598 Bottighofen
071 688 23 60
ristorante-piccolomondo.eu
Lunes: Cerrado
Martes: 11:00–14:00, 17:00–22:00
Miércoles: 11:00–14:00, 17:00–22:00
Jueves: 11:00–14:00, 17:00–22:00
Viernes: 11:00–14:00, 17:00–22:00
Sábado: 11:00–14:00, 17:00–22:00
Domingo: 11:00–14:00, 17:00–21:30
Piccolo Mondo es un restaurant ubicado en Bottighofen, ofreciendo una variedad de opciones que incluyen Tiene asientos al aire libre, Ofrece para llevar, Sirve para comer en el local. Conocido por Sirve excelente café, Sirve excelentes postres. El ambiente se describe típicamente como Casual, Acogedor, Tranquilo. un rango de precios de $$.
071 688 23 60
ristorante-piccolomondo.eu
Pequeño lugar. Creo que los propietarios atendieron. La comida está recién preparada.
El restaurante italiano Piccolo Mondo en Bottighofen ofrece una impresionante experiencia gastronómica, caracterizada por un excelente servicio y un ambiente agradable. Nuestra visita al área al aire libre del restaurante fue particularmente agradable, ya que ofrece no solo un amplio asiento sino también áreas de juego para niños, lo que es particularmente atractivo para las familias con niños. Los precios del restaurante son de rango medio, lo que representa una muy buena relación calidad-precio. La calidad de los alimentos y el cuidado con el que se prepara justifica completamente el costo. De particular, son los ingredientes frescos y los auténticos sabores italianos que aparecen en cada plato. El servicio en Piccolo Mondo es excelente. El personal es muy cortés y atento, pero siempre profesional y amigable. Tal servicio contribuye significativamente a una visita agradable y relajada en el restaurante. En conclusión, Piccolo Mondo en Bottighofen es una excelente opción para cualquier persona que busque una auténtica experiencia gastronómica italiana sin sacrificar la comodidad y un ambiente amigable para los niños. Un restaurante muy recomendable que estaríamos encantados de visitar nuevamente.
Éramos tres en el restaurante. La recepción fue amigable. La comida estaba bien, pero nada particularmente notable. El único inconveniente era que el camarero olía muy fuertemente a humo, que era repulsivo.